
En mis silencios, te pienso,
En la penumbra, te busco,
pero ya no estás,
y aunque entiendo tu ausencia
cual vacío dejas mi corazón,
sin tu saber, sin tu mente,
la incertidumbre llena mi alma.
En tus silencios,
me gritabas tan alto,
pero no conseguí romper tu coraza.
La amargura, minó tu espíritu,
se adueñó de tu mente,
y consiguió dañar tu cuerpo,
nunca tu corazón.
Tu corazón y tu alma,
están atados a mí, a mi vida,
a mi mente,
a mi ser.
Quisiera poder contarte,
Hay tanto que quiero contarte.
Quisiera poder decirte,
hay tantas dudas en mi alma,
quedaron sin respuesta,
tras tu partida.
Quiero ser,
Quiero hacer,
lo que tú no pudiste,
quiero vivir por ti,
quiero entender,
quiero aprender,
por ti, por mi,
Para tí,
Por los dos.
Porque como iguales fuimos,
y seremos.
Porque aunque duro fue el camino,
Nunca de tu cariño dudé,
nunca de tu dolor dudé.
Intenté ayudarte,
Lo intenté,
dios sabe que lo intenté,
lo pedí a gritos,
pero nadie me escuchó
no logré romper la coraza,
que oprimía tu alma,
que ahogaba tu vida.
Es tan grande el vacío,
que tu pérdida dejó en mi.
Y aunque oculta,
siempre vi la luz que brillaba en ti,
en tu mirada,
en tu sonrisa,
añoro tu luz,
tu presencia,
quiero pensar que me escuchas,
que me sientes,
que nos sientes,
que me cuidas,
que nos cuidas.
Ahora nada empaña tu brillo.
Se rompió tu coraza de amargura,
Y con toda tu sabiduría,
vuelas libre,
ya nada te daña,
ahora toda tu luz es blanca,
nada ciega tu mente,
nada bloquea tu alma,
ahora tienes las respuestas,
aquellas que tanto buscabas,
ahora eres,
quien siempre debiste ser,
nada oculta tu amor,
nada enturbia tus talentos,
tus virtudes.
Se que sabes, que te quiero,
Se que sientes, que te quiero,
Y llegará,
llegará el día del reencuentro,
de que tu luz,
inunde mi alma,
de despejar éstas dudas,
de que me des tus respuestas.
Hoy eres mi inspiración,
mi guía.
Y con tu energía,
diriges mis pasos.
Me alientas en el desasosiego,
me ayudas y me empujas.
Y piensen lo que piensen,
a mi lado estás,
junto a mi caminas.
Tan solo me apena,
que por tan lejana,
tu voz no logro escuchar.,
pero siempre podré
leer tus labios en mis sueños.
Aquí estoy,
con paso firme y decidido,
busco las respuestas,
busco la felicidad,
y trato de ser la persona
que siempre debí ser,
ya nada puede esconderme,
ya nada puede apagarme,
con tu fuerza junto a mi,
mi luz es inmensa,
puedo con el dolor,
puedo con la vida
por ti,
por mi,
por ellos,
por nosotros.
Incluso en tu partida,
me has enseñado tanto,
he aprendiendo tanto de ti,
que nada podrá borrarlo,
si soy quien soy,
es por ti.
Gracias por ser quien fuiste.
Hasta pronto.